Ando de fodonga. Me la he pasado leyendo y durmiendo, para variar. La inspiración brilla por su ausencia y la disciplina se resiste como cada domingo. Nada interesante en el periódico. Setenta exámenes por revisar. Monterrey, lluviosa. Silvia Plath, más deprimida que de costumbre: desalentadora. Mejor me voy al cine. Ajum.
PD: Mañana empiezo la gira por municipios ("inter-ranchonal", le llama Óscar).
"¿Vas a ir a leer poesía a los narcos?", preguntó mi hermano anoche. Y agregó: "Que yo sepa, en los pueblos de Nuevo León sólo hay eso".
Ya veremos...
4 comentarios:
HOLA QUE TAL.
DI CON TU BLOG GRACIAS A QUE LEO EL BLOG DE CHICAREGIA Y POS AHI VI TU ENLACE... TE HABIA VISTO LEER ALGO DE LO QUE ESCRIBES EN LA CASA DE LA CULTURA CREO, Y MIRA LO QUE SON LAS COSAS, TIENES UN BLOG! QUE CHIDO... POS POR AQUI ME TENDRAS LEYENDOTE.
Y POS CON RESPECTO A TU POST, DEJAME DECIRTE: QUE BUENO FUERA QUE TODOS EN LOS PUEBLOS FUERAN NARCOS ASI TENDRIAN LANA Y NO TENDRIAN QUE ROGAR POR UN POCO DE ATENCION A NUESTROS GOBERNANTES. FELICIDADES POR ESE PROYECTO DE LECTURA A NUESTRA GENTE!
Leer y dormir ¿habrá más grande belleza?
Un abrazo, Dulce y buena gira.
Ojalá sea un viaje agradable :)
E.
Ash, ya había puesto el comment. Maldito wireless pirata del primer mundo.
Vale, decía que en Nuevo León los únicos que leen son los hijos y las esposas y las queridas de los narcos.
Yo
en casa,
con frío.
El domingo probé una coca-cola de 60 euros. Nada extraordinario.
Ahora escribo un reportaje de Madrid y de Almodóvar para una revista de México, de la llevo beca.
Y el miércoles me lanzo a San Sebastián al festival internacional de cine, quizá logre entrevistarlo por contacto de un amigo nuevo que vive acá.
Ay, la vida en la Gran Vía...
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